Un problema sanitario regional. El Mal de Chagas
Introducción
En este post, con el que cerramos la propuesta para trabajar con el texto Agua y Adobe relatos sobre el pasado de enfermedades presentes, abordamos el capítulo 3: “La decisión de Salvador Mazza”, en el que se presenta las ventajas que tenía el desarrollo del ferrocarril para unir localidades distantes, así como para el progreso económico, pero al mismo tiempo las enfermedades –como el paludismo o malaria. A la que estaban expuestos los obreros que trabajaban en la colocación de las vías para la expansión del sistema ferroviario.
Carlos Chagas –brasileño- fue enviado para el estudio del paludismo que afectaba a los obreros de ferrocarril en Lassance (Brasil), pero simultáneamente estudiaba un insecto el barbeiro -vinchuca- que infestaba las casas y picaba a los humanos. Había ido a estudiar el paludismo pero encontró un nuevo microorganismo, llamado ahora Trypanosoma cruzi. También había descubierto una nueva enfermedad que se conocería como Mal de Chagas.
Pero investigar sobre esta dolencia no era sencillo porque se relacionaba con la pobreza y esto molestaba a los gobiernos. Según afirman Massarini y Schnek (2015) el intercambio de correspondencia entre Carlos Chagas y Salvador Mazza revela que ambos investigadores coincidían en relacionar las causas de la enfermedad con las condiciones de vida de las poblaciones afectadas.
Carlos Chagas finalmente le escribe a su colega argentino Salvador Mazza aquella advertencia sobre la oposición de los gobiernos había resuelto dedicar sus esfuerzos a la creación, en el noroeste argentino, de un instituto para investigar allí, no desde Buenos Aires, las enfermedades producidas por diferentes agentes infecciosos y parásitos, en particular el Chagas. Esta determinación de Salvador Mazza muestra que si bien la ciencia puede desplegarse para preservar intereses dominantes de clase o género, en este caso también puede serlo para aliviar el sufrimiento humano y promover una perspectiva liberadora para los hombres, mujeres y niños” (Wolovelsky, 2004: 19,20). Esto implica pensar la enseñanza de la ciencia como parte de la cultura, contextualizada históricamente, atravesada por aspectos sociales, políticos, económicos.
La enfermedad de Chagas
La enfermedad de Chagas es la principal endemia de América Latina que causa decenas de miles de muertes cada año, y constituye una problemática regional de relevancia social, en la cual intervienen de manera directa diferentes aspectos tecnocientíficos.
El agente etiológico que produce la enfermedad es un protozoo llamado Trypanosoma cruzi que puede habitar en la sangre y otros tejidos de humanos y diversos animales de sangre caliente (murciélagos, gallinas, chanchos, vacas, gatos, perros, coatíes, mapaches, comadrejas, zorros y numerosas especies de roedores y marsupiales autóctonos de América).
El vector es la vinchuca (Triatoma infestans) se denomina popularmente "vinchucas", "barbeiros", "chinches" o "chipos" dependiendo de la zona geográfica de que se trate. Es un insecto considerado domiciliario porque habita en las viviendas humanas. Solo trasmite la enfermedad si antes ha picado a individuos o animales infectados y le chupa la sangre con los tripanosomas. Estos se reproducen en el intestino de la vinchuca y son eliminados con la materia fecal del insecto.
Durante el día la vinchuca se oculta en grietas de paredes y pisos, especialmente si no están revocadas; en los resquicios de los techos de paja o madera; detrás de mueves, cuadros y cajones. También se refugia en corrales, gallineros y palomares.
Huye de la luz, por eso solo sale de noche. Busca a sus víctimas en la oscuridad, y se deja caer desde el techo produciendo un ruido muy particular, de ahí su nombre que deriva de la palabra quechua “Wichukuy” que significa caer con violencia. Como la picadura es incolora no llega a despertar a la víctima.
Generalmente pica en zonas descubiertas especialmente en la cara y los brazos. Al picar deja sobre la piel sus deyecciones llenas de tripanosomas. Eso produce una leve picazón, cuando el individuo se rasca, lastima la piel y así penetran los tripanosomas en el organismo y lo infectan.
A la incubación, que dura 1 o 2 semanas, sigue un período agudo en el cual se presentan los signos y síntomas generales de toda infección: fiebre, cansancio, dolor de cabeza, malestar, e inapetencia. No todas las personas infectadas tienen síntomas durante esta fase. En la mitad de los casos aparece un signo, que es un edema duro en los párpados de un ojo que toman color púrpura conocido como “un ojo chagásico”, y otras lesiones en la piel.
Le sigue un período de latencia durante el cual no hay señales de la enfermedad, que solo puede diagnosticarse por análisis de sangre. Los parásitos permanecen ocultos, principalmente enquistados en el músculo cardíaco y digestivo. Esta fase puede extenderse por quince o veinte años y es en la que permanece durante el resto de sus vidas la mayoría de las personas infectadas. Muchos permanecen en esta etapa, mientras que otros pasan al período crónico caracterizado por dilataciones en órganos huecos (esófago, colon), y lesiones cardíacas –conocida como cardiopatía chagásica- que pueden ser de gravedad y ocasionar la muerte súbita o a la insuficiencia cardiaca causada por la destrucción progresiva del músculo cardíaco que provoca el parásito.
Las condiciones ambientales y la enfermedad de Chagas
Independientemente de las condiciones climáticas que favorecen el desarrollo de las vinchucas, existe otro factor ambiental predisponente fundamental, constituido por la pobreza. Viviendas precarias de barro o adobe o sin revocar, suelo de tierra, techos de paja, presencia de animales domésticos en contacto con los habitantes, huertos y cercos con paredes de adobe, acopio de leña en cercanías de la vivienda, cabras y cerdos en contacto con los humanos y desatención sanitaria o discontinuada, son condiciones socioeconómicas que favorecen el desarrollo y la transmisión de la enfermedad.
A esto se suman ciertas realidades socioeconómicas propias de las áreas chagásicas, como la ausencia de empleo estable, de agua potable, de buena alimentación y de acceso a los centros de salud, lo cual conlleva diversas consecuencias: aumenta el riesgo de transmisión y conspira contra estrategias de control y prevención de la enfermedad.
Este contexto da cuenta de la denominación de la enfermedad de Chagas como "enfermedad de la pobreza". A su vez, esta denominación construye, a través del discurso, una forma de considerar a la enfermedad de Chagas que la despega de un designio "naturalizado" o inevitable y la sitúa como una problemática que puede y debe ser abordada integralmente, haciendo hincapié en las condiciones materiales de los sectores sociales afectados (Zabala, 2012).
Sugerencias de trabajo
-El texto “Agua y adobe”, particularmente el capítulo 3, posibilita el abordaje didáctico sobre las enfermedades que constituyen problemas sanitarios argentinos y de alcance regional, las migraciones humanas, la ciencia en argentina y el contexto político, social económica en el que se produce, la ciencia y la tecnología en argentina, el tratamiento de las enfermedades infecciosas, la salud y el ambiente.
-Una propuesta de trabajo que promovería el debate público sobre las ciencias en nuestro país se abre al plantear preguntas inspiradas en este texto tales como: ¿por qué la investigación de Carlos Chagas podía molestar a varias personas influyentes?, ¿por qué tendría a todos los gobiernos en contra?, ¿cuál era la importancia del ferrocarril para el estudio del mal de Chagas?, ¿cuáles eran las causas sociales y económicas que se vinculan a esta enfermedad?, entre otras.
-También es conveniente la adopción de metodologías activas de aprendizaje como el Aprendizaje basado en Proyectos o Problemas (ABP) que recuperan el protagonismo de los estudiantes. El tema de la enfermedad de Chagas puede representar una interesante posibilidad para trabajar por proyectos o por problemas que convoque a disciplinas como: historia, geografía, biología, lengua y literatura, plástica, educación para la salud, entre otros. Algunos interrogantes que plantean Massarini y Schnek (2015) pueden dar comienzo a un proyecto:
-¿Por qué la enfermedad de Chagas es un problema relevante en América Latina?
-¿Quiénes son los afectados por Chagas a nivel regional? ¿Quiénes padecen esta enfermedad?
-¿Por qué se dice que la enfermedad de Chagas es una "enfermedad olvidada"?
-Teniendo en cuenta que se trata de una problemática compleja de salud pública, ¿qué roles cumplen los aspectos sociales, políticos, económicos y tecnocientíficos en la comprensión integral de esta enfermedad?
-¿Cómo se puede interpretar la persistencia de esta enfermedad en un contexto en el cual se encuentran disponibles los medios tecnocientíficos para controlarla?
-¿Qué papel han jugado las políticas públicas en relación con este tema?
-¿Qué rol juegan la educación y los diversos estilos de comunicación científica? ¿Cómo abordar este complejo tema en el aula?
-Algunos de los textos de la colección se han grabado para personas con disminución visual o con dificultades motoras, neurológicas y educacionales, o para quienes prefieran o necesiten acercarse a la reflexión sobre la ciencia a través de la narración oral y constituyen Nautilus sonora. "Vinchucas o crustáceos". La decisión de Salvador Mazza se puede consultar en: http://www.rojas.uba.ar/contenidos/nautilus/mixfinal_mezcla.mp3
-Se propone un cruce entre el eje de salud y el cine a través de la película Casas de fuego en la cual se expone la tarea del Dr. Salvador Mazza. Esta película, dirigida por Juan Bautista Stagnaro, fue estrenada en el año 1995. Recibió reconocimientos tales como el Premio Especial del Jurado en el Festival Internacional de Shanghai en 1995; el mismo premio en el Festival Internacional del Nuevo Cine Hispanoamericano de La Habana y el Premio Cóndor de Plata en 1996 a la mejor película, entre otros. La crítica, tanto especializada como aficionada, valoró no solo las actuaciones, el guión y la fotografía, sino el abordaje de una problemática local grave y de enorme impacto social.
Recomendamos especialmente el capítulo “Derribar la frontera interior” del libro Iluminación de Eduardo Wolovelsky en el que a través de narraciones fílmicas posibilita aproximarse al sentido político de la investigación y de la práctica médica encarnada en la figura del médico Salvador Mazza, a partir de la película Casas de Fuego.
Para trabajar con la película en la escuela secundaria tomamos en cuenta por un lado la propuesta de Revel Chion (2015) que sugiere analizar la película, casi tres décadas después de su estreno, a la luz de los cambios que se han producido a nivel social, científico y médico, e identificar los elementos vigentes y aquellos que han sido mejorados, reemplazados, corregidos.
Posteriormente se propone elaborar una guía de trabajo para estudiantes que centre el análisis en los aspectos epistemológicos, es decir, en qué imagen de la tarea científica y de los científicos se expone, qué dilemas morales se presentan, qué intereses sociales se rescatan y cómo se desnudan, qué lugares ocupan las mujeres en la trama presentada y qué grado de ajuste, en relación con los aspectos científicos de la enfermedad, muestra el film.
Por su parte Massarini y Schnek (Op. cit.) proponen algunos interrogantes para analizar la película:
-¿Qué progresos hubo desde la época en la que transcurre esta película?
-¿Cuál es el modelo de ciencia y de científico que representa el caso de Salvador Mazza?
-¿Qué relación entre ciencia y sociedad sugiere su práctica?
-¿Qué elementos para la reflexión aporta este caso en relación con los actuales modelos y rumbos de la ciencia argentina?
Bibliografía
-Errasti, R. y Wolovelsky, E. (2014). Agua y adobe. Relatos sobre el pasado de enfermedades presentes. Ministerio de Educación de la Nación, Buenos Aires.
-Revel Chion, A. (2015). Educación para la salud. Enfoques integrados entre salud y ambiente. propuestas para el aula. Paidós: Buenos Aires.
-Wolovelsky, E. (2004). Certezas y controversias: apuntes sobre la divulgación científica. Buenos Aires: Libros del Rojas.
-Wolovelsky, E. (2008). El siglo ausente: manifiesto sobre la enseñanza de la ciencia. Buenos Aires: Libros del Zorzal.
-Wolovelsky, E. (2013). Iluminación. Narraciones de cien para una crítica sobre la política, la ciencia y la educación. Buenos Aires: Biblos.
-Zabala, J. P. (2012). La enfermedad en su laberinto: avances desafíos y paradojas de cien años del Chagas en Argentina. Salud Colectiva, 8 (1): 59-521.
Link de archivos adjuntos:
Paludismo: http://www.msal.gob.ar/images/stories/bes/graficos/0000000174cnt-10-2-3-3-K-Paludismo.pdf
Mal de Chagas: http://www.msal.gob.ar/images/stories/bes/graficos/0000000172cnt-08-2-3-3-I-modulo-Chagas.pdf
Autor/es: | CASTRICONE, LUCAS |