RECORRIENDO LA CASA (continuación)…

JUGAMOS CON LOS UTENSILIOS DE COCINA.

En la publicación anterior hablamos de los objetos, de cuando un “tenedor” pasa a ser un peine, entonces, lo estamos transformando y así estamos jugando.

Hay veces que no sabemos a qué jugar…  se nos agotan las ideas. entonces es el momento de recurrir a los objetos y la idea es inversa… es el OBJETO el que nos invita a jugar.

Hoy vamos a buscar utensilios de cocina; cucharas, cucharón, espumadera, pinzas, ollas, bandejas, vasos, platos …, aquello que cotidianamente usamos para cocinar o comer.

Tomemos un objeto de esa cocina y descubrámoslo… ¿qué forma tienen?; ¿tienen partes rectas y partes curvas?, ¿cuál es su textura?,¿es pesado?, ¿lo puedo tomar con una mano o necesito las dos?…

¡Y ahora sí!!!…. las ollas pueden ser sombreros, los platos armaduras contra los gigantes que nos acechan, el cucharón una bella princesa, el colador un inmenso monstruo… confiemos en nuestra imaginación, en ese niño que llevamos dentro y en ese niño/a que tenemos enfrente para JUGAR.

En otro momento podemos vestir esos utensilios con un repasador, con una esponja. Entonces estaremos agregando “lo extraño” que tendrá un lugar de caracterización para el personaje construido.

Cuando finalicemos, volvemos a nuestra bitácora (recordemos que era “nuestro cuaderno de navegación” que nos acompañaba en esta etapa de cuarentena, registrando lo importante da cada día) y adherimos algunos de esos elementos a las hojas que lo constituyen. Por ejemplo, podemos apoyarlo y contornearlo, pegar una réplica en miniatura, como un plato o vaso hechos “en chiquito” en un cartón o sólo una parte del objeto total, como la tapa de una olla o el asa de una taza.

Pero, antes de abrir la nueva página de la bitácora vamos a ir a la hoja anterior, las vamos a tocar, la vamos a relatar, estaremos evocando lo sucedido.

De esta manera el tiempo se hará tangible en las hojas llenas que evocan el pasado, en otras en las que estamos construyendo el presente y en otras vacías que es el futuro, aquello que aún no aconteció.

En este momento de cuarentena, estamos viviendo un tiempo que no conocíamos; las rutinas ya no se llevan a cabo, tal vez haya otras y el tiempo tiene otro modo de transcurrir. Darle un lugar material al tiempo es uno de los objetivos de esta bitácora para que, cuando podamos volver a abrazarnos con los compañeros /as y maestras/os podamos hablar de este tiempo que ya será pasado.

 

Prof. Silvia Scumaci.

Colaboradora.

 Dirección Provincial de Educación Especial.