Los desafíos de ser estudiante superior en estos tiempos.
Impulsores de iniciativas que develan transformaciones, creadores de nuevos fundamentos, hacedores de la historia, promotores de proyectos y productores de inquietudes incesantes.
Ser estudiante evoca al tiempo pulsional, a la metamorfosis más profunda, momento de interpelar, cuestionase e interrogar con espíritu desafiante. Juventud curiosa, palpitante de nuevos mundos en los entramados colectivos, con identidad propia y voz atenta a los gritos del futuro.
Portavoces de cambios, emancipadores sociales, cuerpo sexualizado, palabras con contrastes y contradicciones de tonalidad múltiple y variante que hacen de nuestra historia la primavera de los nuevos tiempos.
Hoy es un día de celebración! Hoy es un día de agradecimiento a todos y todas los estudiantes del nivel superior, quienes con ímpetu de superación y deseo pulsante asumen su propia historia en tiempos de adversidad, tal como nos enseñó Albert Einstein. . “En medio de la dificultad reside la oportunidad”. Se agradece profundamente al Equipo de Políticas Estudiantiles Ps. Lucía Rosi y Tobías Crudeli , quienes contribuyen al intercambio dialógico con las y los estudiantes desde el compromiso y la dedicación.
Subsecretaría de Educación Superior.
Mg. Patricia Moscato.
Los desafíos de ser estudiante superior en estos tiempos
En este escrito buscaremos abordar, dentro de una lógica narrativa, aquello que se presenta como un desafío en torno a ser estudiante de la educación superior. Desafío, que no se desentiende del contexto sanitario, con todo lo que el mismo conlleva desde el mes de marzo de 2020: virtualidades, alternancia, bi-modalidades, pruebas piloto, etc. Este transcurrir de experiencias inéditas para cada actor del sistema educativo, donde, las trayectorias estudiantiles fueron posiblemente las más golpeadas y puestas en jaque de continuo.
Tampoco desconocemos lo desafiante que conlleva encontrarnos en un contexto de producción de subjetividad caracterizado por una lógica neoliberal. Por esto último, entendemos al orden de mutación del orden social, cultural, económico, político, un arte de gobierno (Murillo, 2019) que trasciende los límites de nuestros territorios y las políticas concretas, al inmiscuirse en los procesos de producción de subjetividad contemporáneos.
En este panorama, las políticas públicas y los lineamientos de trabajo que apuestan a garantizar derechos para todes, la participación estudiantil, el reconocimiento de un colectivo, se presentan como emblemas de resistencia en estos tiempos.
En estos tiempos…
Lo trillado de la referencia a ‘estos tiempos’, nos sirve para poner sobre la mesa aquello que presenta un desafío concreto a la hora de pensar la participación política institucional del colectivo estudiantil. Vale la pena aclarar, este hecho no es aislado, sino, consecuencia de una mutación en torno a cómo es concebida en nuestras sociedades: la política, lo colectivo, la ciudadanía. Esta breve reseña nos sirve a modo de marco conceptual, a los fines de comprender cuál es la subjetividad, la ciudadanía a la que se convoca, propia de estos tiempos, y no a los fines de agotar el análisis sobre estos procesos que exceden en complejidad a este escrito.
Es el neologismo foucaultiano de gubernamentalidad, en tanto arsenal de prácticas desplegadas sobre los cuerpos individuales y colectivos, que implican aspectos concretos y objetivos, a la vez que producen subjetividades determinadas por una serie de ideales, nos permite pensar la razón gubernamental propia del neoliberalismo. Esclarece el modo en que se da una transformación en la constitución de la subjetividad, dando al ser humano en tanto individuo el lugar de empresario de sí mismo (Foucault, 2007). Son los propios individuos, su capital, su trabajo, y quienes determinan sus procesos de producción. Este arte de gobernar, es influyente en la subjetividad, como así también en el rol de los Estados, que se debilita y genera un apartamiento de la principalidad como agente garante de acceso al bienestar colectivo de las poblaciones (Murillo, 2019).En este marco, lo colectivo, lo social, pasa a ser concebido política y discursivamente como conjunto de individuos.
El individuo por sí mismo, se presenta como el agente de su acceso al bienestar, separado de los vínculos y pertenencia a colectivos sociales. Esta cultura del self, caracterizada por la hiperindividualización, trastoca los vínculos con otres al posicionar a cada une como plausible de garantizar el acceso a sus derechos. La autogestión (Ortiz Gomez, 2014) en tanto lema conlleva a la atomización del entramado social, fragmentando los vínculos y el sentimiento de pertenencia a un colectivo.
Resulta claro que en este marco, la implicación del colectivo estudiantil con la política institucional en particular y la política en general se presenta en gran medida dificultada.
Además, es menester no dejar de considerar la fragmentación social atemperada por la situación sanitaria que nos acecha desde marzo del 2020. Si bien, estos procesos de constitución de subjetividad ya se encontraban presentes, concebimos que la falta de contacto físico, presencial, entre los diferentes actores de la institución y con la materialidad de la misma, conlleva inevitablemente a una desafiliación general.
Reiteramos, que ante este panorama tan turbulento para pensar la participación estudiantil, afortunadamente, no dejan de existir experiencias de resistencia a las oleadas individualistas. Experiencias de gestión, de escucha, de participación, que continúan apostando a una respuesta colectiva. Desde el equipo de Políticas Estudiantiles, de la Subsecretaría de Educación Superior, trabajamos desde una posición de escucha que recoja las experiencias y demandas de les estudiantes de Santa Fe. Nuestro compromiso ético y político es que se trate de una escucha habilitante, que posicione al estudiantado del nivel superior en el lugar de adulto protagonista de las políticas y líneas de trabajo que hacen a este nivel. Desde este vínculo establecido con el estudiantado, es menester reconocer su participación y voz al definir las siguientes problemáticas que nos sirven de brújula para pensar nuestro trabajo.
Durante el mes de mayo del presente año fueron realizados diferentes encuentros vía plataforma de Google meet con estudiantes de todo el territorio santafesino, si bien la comunicación no se agota en esos encuentros, los mismos resultaron sumamente provechosos para recortar los siguientes puntos.
La conexión a internet, una deuda con la educación superior. La dificultad en el acceso a una buena señal de internet, al mismo tiempo que la ausencia en gran parte de la población del nivel superior constituyó una demanda explícita por parte del estudiantado. Si algo nos ha dejado la pandemia es la certeza en torno a la centralidad de este servicio para el acceso a la educación y al mundo laboral. Consideramos en este sentido, una enorme deuda con la población de nuestra provincia, deuda que se plasma en el gran número de estudiantes que relatan la enorme dificultad que conlleva sostener virtualmente sus estudios, siendo la deserción la primera y única opción en numerosos casos. En este difícil panorama, el proyecto Santa Fe + conectada es la respuesta concreta a esta demanda consolidada del estudiantado santafesino.
Necesidad de un software de gestión académica en educación superior. Otro hito en las reuniones e intercambios con estudiantes se encuentra en torno a un hecho de antigua data, pero que en medio de las medidas de aislamiento se evidenció. Las diferentes formas en que cada instituto superior de la provincia gestiona académicamente la información, conlleva a que el estudiantado no esté al tanto de su historia académica, modalidad de inscripción a exámenes, o el acceso a certificaciones. Por este motivo, desde el equipo de Políticas Estudiantiles, ha sido solicitada la conformación e implementación de un software de gestión académica unánime para todos los institutos superiores de la provincia, en el que se está trabajando en este momento.
Participación institucional y falta de elecciones .Un enorme desafío para el estudiantado y nuestro equipo resulta acompañar e incentivar los procesos de democratización de los institutos superiores. La imposibilidad de realizar elecciones de centro de estudiantes el pasado año resultó debilitante de los mismos, al mismo tiempo que el egreso de quienes pertenecían al mismo y a las diferentes agrupaciones. Este hecho, sumado al contexto desfavorable en torno a la participación en temáticas colectivas de la ciudadanía en general, conlleva a un enorme debilitamiento de la participación política del estudiantado en los institutos. Nos encontramos, comenzando el cierre del 2021, pensando y planificando futuras acciones que fortalezcan y vuelvan a incentivar la participación en contexto de retorno a aquello que nombramos como normalidad.
Parar la violencia machista ya. Por último, pero no menos importante, una temática que reitera son las formas de discriminación y/o violencia como problemática social general, no exceptuando al sistema educativo. El testimonio de cada estudiante es nodal para la construcción de institutos más justos, que construyan una educación superior más inclusiva y diversa. La puesta a disposición del equipo y la organización de charlas y/o conversatorios en torno a la perspectiva de género, ESI, violencias, se presentan como el comienzo de un enorme trabajo que nos espera en esta línea. Tenemos una profunda convicción en torno a que la circulación de la palabra en torno a esta problemática lleva a su desnaturalización y futura intervención, y por allí vamos.
Para concluir.
Los párrafos anteriores toman de a momentos un cariz pesimista que no se desentiende del difícil contexto que vivimos, hacer caso omiso ante estos hechos resulta cuanto menos imposibilitante. Por este motivo, trabajamos a partir de la puesta en común de lo que sucede, para pensar siempre en conjunto y en dirección a garantizar el derecho a la educación superior.
Es menester, retomando lo planteado al comenzar, reconocer todas aquellas acciones de participación, compromiso, construcción colectiva, con que nos encontramos día a día. Sabemos lo desafiante que resultan estos tiempos para apostar a construir y trabajar más allá de una, uno, une. Por esto, desde el Ministerio de Educación, no dejamos de honrar a les estudiantes del territorio santafesino que día a día trabajan en esta dirección, en contra-corriente a los discursos hiperindividualizantes y meritocráticos con todos sus efectos subjetivantes. Por este enorme, gigante, inmenso desafío que constituye en estos tiempos ser estudiantes de la educación superior, les deseamos afectuosamente un felíz día del estudiante.
Bibliografía:
- Foucault, M (2007). El nacimiento de la biopolítica. FCE. Argentina.
- Murillo, S. (2019). Construcción de hegemonía y procesos de subjetivación en el arte del gobierno neoliberal. En: Guido Galafassi y Florencia Ferrari (Comp.) Disputas, hegemonía y subjetividad. (71-95) Ranelagh, Theomai, GEACH, Extramuros.
- Ortiz Gómez, M. G. (2014). El perfil del ciudadano neoliberal: la ciudadanía de la autogestión neoliberal. Sociológica (México), 29(83), 165-200. Recuperado en 18 de septiembre de 2021, de http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0187-01732014000300005&lng=es&tlng=es.
Autor/es: | LEONETTI, GISELLE EDIT |